6/7/08

El polvo de ladrillo le queda chico

Nadal dejó de ser sólo el rey del polvo de ladrillo. Es que Rafa derrotó al suizo Roger Federer por 6-4, 6-4, 6-7 (5-7), 6-7 (8-10) y 9-7 en la final del tercer Grand Slam de la temporada y, de esta manera, puso fin a una racha ganadora de 5 títulos consecutivos del helvético sobre el césped inglés.
A pesar de que la de hoy fue la final más larga del All England-el encuentro fue interrumpido varias veces por la lluvia-, la espera valió la pena. Con este triunfo el español, además de ganar por primera vez el título inglés, se convirtió en el primer tenista que logra ganar en un mismo año Roland Garros y Wimbledon desde Bjorn Borg en 1980.
El de Mallorca arrancó el choque con el pie derecho, ya que con un gran tenis y un revés más que preciso, se llevó los dos primeros sets por un doble 6-4; pero el receso por lluvia parece que hizo reflexionar al de Basilea. En la reanudación del juego apareció el Federer que todos estaban esperando: se vio lo mejor de él y se llevó el tercer parcial. Ya en el cuarto, el suizo levantó dos match points y consiguió la igualdad tras un peleado tie break.
Tras una nueva interrupción por la lluvia, el set decisivo fue el más tenso y emocionante: con el marcador 7-7, el español le quebró el servicio al mejor del planeta, y pudo festejar cuando el último drive del suizo se clavó en la red.
"Es un sueño ganar aquí", confesó el manacorí al término del encuentro, y también tuvo elogios para su rival: "Roger sigue siendo el mejor, ha demostrado que es un campeón y para mí esto es muy importante".