El 2008 no fue un muy buen año para algunos jugadores argentinos, ya que las lesiones fueron un carma para ciertos tenistas: Juan Ignacio Chela, Juan Mónaco y David Nalbandian fueron los más perjudicados.El flaco jugó su último partido oficial en Roland Garros, y luego tuvo que ser operado por presentar una hernia inguinal; lo que lo hizo caer en el ranking mundial, para finalmente ubicarse en el puesto 140°. Por su parte, Pico Mónaco no terminaba de salir de Guatemala que ya se metía en Guatepeor. El chico de Tandil estuvo tres meses afuera del circuito por una fractura de tobillo que sufrió en febrero, cuando disputaba el torneo de Viña del Mar. Tras ese percanse, volvió al ruedo, y luego de jugar Roland Garros contrajo neumonía, lo que lo llevó a perder ocho kilos y bajar su rendimiento; sin embargo en octubre volvió con todo y cerró el año coronándose campeón de la Copa Argentina de Tenis Peugeot.
En tanto Nalbandian, sufrió una hernia deportiva inguinal y dolores de cadera, razones por las cuales tuvo de marzo a septiembre una mala racha. Una vez superados los problemas físicos, el cordobés volvió con todo, ya que se coronó campeón en Estocolmo, venció en la final del Masters Series de París al escocés Andy Murray, también ganó en Basilea, y consiguió el 1-0 sobre Ferrer en la final de la Copa Davis. Un verdadero titán.
